Luís Miguel Guerra es novelista, historiador, profesor y secretario de Formación del PSC de Barcelona. También es miembro del Comité de Redacción de l’Endavant!

Esperaba empezar el periodo postvacacional tranquilo y sosegado. Después de los sobresaltos del día 23, resuelto el tema de la presidencia del Congreso y con un Feijóo mareando la perdiz a ver cuánto aguanta sin que le localice Medusa y lo fulmine con la mirada (simpática comparación que no es mía), esperaba poder iniciar las aportaciones de este curso con alguna cosa, que no por veraniega y placentera, fuera menos importante. Pensaba escribir sobre el viaje que he hecho a Milán, una ciudad que me ha parecido digna de visitarse y retornar.

Pero no puede ser, porque una nueva cantinela se ha apoderado de la derecha y sus terminales mediáticas. Vuelve uno y se encuentra con la llamada del PP a una hipotética quinta columna que habita en el PSOE para que vote la investidura de Feijóo. Ayuso que dice que en siglo XX ya hubo que parar los pies a la izquierda, sólo recuerdo un asunto así entre 1936 y 1939. Esperanza Aguirre que llama a los españoles a una lucha sin cuartel contra el monstruo de Pedro Sánchez. En fin, parece que la consigna, vista la situación actual, es la de llamar a la guerra civil y ganarla, por supuesto. Sus medios y redes andan en esta línea. Y es que según Ayuso, a la que le escriben todo lo que lee porque dudo que entienda lo que dice, suelta que el objetivo de la izquierda es una república, federal y laica… ¡Cómo si fuera ofensivo o el anuncio de los infiernos! Supongo que no sabe que está describiendo a Alemania, por ejemplo, o a Estados Unidos. Pero bueno, ya que para ella es la representación del mal, suponemos que lo contrario es la encarnación del bien. Es decir, la monarquía (aunque con el canto a la sublevación del 36 no estoy muy seguro) unitaria (supongo que además, grande y libre) y confesional (eso de la cruzada mola). Y todo esto coincide en el tiempo con retirar el nombre de Almudena Grandes de una biblioteca, hacer alcaldesa honoraria de Valencia a Rita Barberá, con altos cargos del gobierno de Aragón retratados con banderas franquistas y alegatos a favor de conocidos demócratas como el general Millán Astray, además de apología de Franco, diciendo que creo la enseñanza pública, la Seguridad Social y todas esas cosas… Y el PP mirando para otro lado se diría, pero no: está mirando donde todos sabemos, porque todo esto le gusta. Ya lo escribí una vez: ¿es VOX el alma de la derecha española? Quieren aparentar ser Jekyll pero les puede Hyde, como nos narró el gran Stevenson.

Y más cosas que no cabe comentar por todo lo que se ha dicho ya, la estupidez de la lista más votada (aunque haya un millón más de gente que no les quiere y que yo sepa el único anuncio de coalición tiene 154 diputados por 133), lo del machirulo de la RFEF y futuro diputado de VOX, los cambios de terminología para referirse a Junts en función del momento, lo de los constitucionalistas y no constitucionalistas, los tres sueldos, el narco, lo de Murcia, que no es una claudicación es un reencuentro… No haré “spoiler” de la novela de Stevenson, pero ¿quién creéis que se impuso al final?