De todos es sabido que tanto la inmigración como fenómeno que impacta en nuestras sociedades (y cuando decimos "nuestras", estamos diciendo "todas"), como el debate sobre que sobre ella se produce, son cuestiones peliagudas sujetas a diferentes puntos de vista, matices, creencias o apriorismos sin fundamento, sentimientos, e incluso bajas pasiones. Esta complejidad no debe impedirnos (al contrario, debería incitarnos) a afrontar una cuestión que es consustancial a la vida en sociedad, con las mayores dosis posibles de luz y conocimiento, de honestidad intelectual.
Es esta necesidad la que ha conducido a la Fundación Jean Jaurès a convocar a una serie de expertos e investigadoras de diferentes disciplinas de su órbita para recabar sus puntos de vista sobre la aprobación por la Asamblea francesa, en diciembre pasado, de la polémica ley sobre inmigración.
Algunos de los trabajos recogidos en esta publicación, prologada por quien fue primer ministro y actual presidente de la fundación Jean Marc Ayrault, son anteriores al pronunciamiento del 25 de enero del Consejo Constitucional (presidido, por cierto, por el también ex primer ministro socialista Laurent Fabius), que oportunamente censuró una parte importante del texto legal, pero mantienen su interés y vigencia por entender el camino político recorrido hasta ahora en este asunto.
En su prefacio, Ayrault defiende que no se puede despejar la cuestión: tanto los sondeos como los resultados electorales a lo largo de los años indican que la inmigración, para una mayoría de franceses, cuestiona la identidad nacional, remueve los valores en los que se sustenta y afecta a la prosperidad. Al mismo tiempo, denuncia que aquellos que han posibilitado la aprobación de esta ley (bien sea redactándola desde un convencimiento de ultraderecha, ya sea sumando vergonzantemente a la votación desde posiciones de centro liberal) son muy conscientes de que no es fruto de una reflexión sobre las razones globales de los flujos migratorios, de que afronta desde el ombliguismo un fenómeno de carácter mundial, de que enreda y no ofrece soluciones a la cuestión de la integración de las personas migradas al largo de décadas, conciudadanos también. Así es como un gobierno supuestamente de centro liberal ha ofrecido en bandeja una victoria ideológica sin precedentes a la extrema derecha, socavando los fundamentos de la República. Una derrota de estos valores, que puede acarrear otras en el futuro.
Ayrault defiende el derecho, esquivado hasta ahora a los franceses, de pronunciarse sobre esta cuestión capital a través de una Convención Ciudadana, un instrumento de debate y participación que ha demostrado ser útil en otras ocasiones.
Varios de los trabajos reunidos tienen la virtud de contextualizar el debate en el tiempo y dar las claves para una confrontación de ideas desapasionada. Especialmente interesante es el recorrido histórico por el siglo XX que dibujan los socialistas francesas Bassem Asseh y Daniel Szeftel, que cuestionan abiertamente el sinfronterismo (sin Fronteras) habitualmente mayoritario en las izquierdas, contraproducente e inútil en el combate frente al carácter antisocial del proyecto actual de la derecha tradicional francesa (Republicanos) y frente a la teoría del “gran reemplazo” de la extrema derecha (Desmontaje nacional, el antes Frente Nacional de Le Pen).
F.G.A.
Autoras: JEAN-MARC AYRAULT, JEAN-MARIE ANDRÉ, EMMA ANTROPOLI, PAOLO ARTINI, BASSEM ASSEH, BASTIEN CABOT, COLLECTIF RÉPUBLIQUE SOCIALE, JÉRÔME GUEDJ, SYLVIE GUILLAUME, SMAIN LAACHER, JEAN-DANIEL LÉVY, ALAIN RÉGNIER, CHLOÉ RIDEL, DANIEL SZEFTEL, BORIS VALLAUD
Loi «Inmigración»: Analyses et points de vue – Varias autoras (Fondation Jean Jaurès, 19/02/24)