- La nueva ordenanza añade nuevas medidas para dar cobertura a aquellos sectores de población más vulnerables
- Se actualizan las autorizaciones para poder circular y también se ampliarán hasta 24 las autorizaciones diarias anuales para los vehículos sin etiqueta ambiental
- La actualización de la ordenanza municipal entrará en vigor a principios de 2023
La nueva ordenanza de la ZBE en Barcelona añadirá nuevas medidas para proteger a las personas con rentas más bajas y más vulnerables con vehículos sin la etiqueta ambiental de la DGT -que recibirán autorizaciones anuales-. Podrán, por tanto, circular por la zona de bajas emisiones con la actualización de la ordenanza municipal que entrará en vigor a principios de 2023. La actualización también ampliará de 10 a 24 el número de autorizaciones diarias que el resto de la población puede utilizar cada año.
Trabajo con entidades, agentes y ciudadanía
La ordenanza se ha trabajado con entidades, agentes y ciudadanía para asegurar su implantación y mejorarla a través de un proceso de participación. El objetivo ha sido impulsar el debate ciudadano en torno al despliegue y aplicación de un instrumento normativo, para obtener un texto consensuado que recoja las necesidades de todos. El nuevo texto busca el máximo acompañamiento a la ciudadanía por nivel de renta y facilitar su uso ocasional.
El texto mantiene la restricción de los vehículos más contaminantes sin etiqueta ambiental de la DGT en los días laborables de lunes a viernes laborables entre las 7 horas y las 20 horas y las exenciones:
- Vehículos dedicados al transporte de Personas con Movilidad Reducida
- Vehículos de servicios de emergencia y esenciales
- Vehículos dedicados al transporte de personas con enfermedades o discapacidad que les condicionan el uso del transporte público
- Vehículos extranjeros que cumplen con los requisitos tecnológicos y de emisiones
Reducir las brechas sociales
La nueva ordenanza supone una actuación positiva en cuanto al impacto económico para la ciudad, ya que los beneficios ambientales que genera compensan los costes de llevarla a cabo. Por lo que respecta al impacto social, los beneficios en términos de reducción de emisiones que comporta la aplicación de la norma, junto con las medidas complementarias que se hacen necesarias aplicar en términos de calidad del transporte público, mejoran las condiciones generales de vida de la población y ayudan a reducir las brechas sociales, ya mejorar el comportamiento económico.
La ZBE en Barcelona
Los objetivos principales de la medida son mejorar la calidad del aire de la ciudad, reducir el impacto climático, fomentar el uso de métodos de transporte más sostenibles, impulsar la eficiencia energética en el uso de los medios de transporte y preservar la salud de la ciudadanía con la reducción de la contaminación ambiental.
Más información: Servicio de Prensa del Ayuntamiento de Barcelona
Imagen: Ayuntamiento de Barcelona