Viard, Jean y Medioni, David. 2022 ediciones de Aube y Fondation Jean Jaurès.
Anualmente la ciudad francesa de Nantes acoge el evento cultural estival "Le Voyage à Nantes", organizado por la institución pública del mismo nombre. Si hasta 2020 la actividad se centró en obras, autores y/o monumentos ubicados en la ciudad, la edición de 2021 acogió el coloquio “Tourisme du futur” en el que una veintena de expertos, directivos y responsables políticas del turismo dialogaron sobre los retos que esta importante actividad tiene planteados.
El punto de partida es simple: desde principios del s. XX, el tiempo que un ciudadano europeo dedica a trabajar, a lo largo de su vida, ha pasado del 40% al 10% (el libro, en este punto, no aclara si se habla de ciudadanos franceses, europeos o de todo el mundo ).
Este cambio en las sociedades industriales, acelerado por la implantación de las vacaciones pagadas por el gobierno del socialista de Léon Blum en Francia en 1936, ha provocado que de los 60 millones de turistas internacionales en 1968 se haya pasado a más de 1.500 millones en 2019. La mayor parte de ellos, con origen en algún país europeo.
Si bien el origen del “viaje”, entendido como experiencia de crecimiento personal, de evolución vital y de aprendizaje, podemos situarlo en la sociedad europea del s.XVI, este tipo de actividad quedaba reservada a las personas con muchos recursos y sus protegidos. No es hasta bien entrado el s.XX que el viaje (ya llamando turismo) se industrializa, masifica y democratiza.
De no haber sufrido la pandemia de la Covid-19, este interesante libro, producto de las reflexiones de los autores y de la recopilación de las aportaciones expresadas en “Voyage à Nantes”-2021 (donde participó Xavier Marcé, concejal de Turismo de Barcelona) , probablemente no existiría.
Por el contrario, el momento de pausa obligada, derivado de las restricciones a los desplazamientos, ha permitido que tengamos un conjunto de planteamientos estructurados que parten del valor que aporta el “viaje” y el conocimiento de nuevos lugares, personas y culturas a los ciudadanos de las sociedades desarrolladas contemporáneas que, como se ha señalado en un principio, cada vez disponen de más tiempo, a lo largo de sus vidas, para cultivarse y aprender.
Una de las reflexiones más interesantes es la que vincula la evolución del turismo a la fijación del patrimonio cultural (material e inmaterial): según los autores, los catálogos de la UNESCO, además de servir para catalogar y preservar estos patrimonios, habría convertido en activos monetizables los patrimonios culturales.
Sin eludir los aspectos negativos de la concentración en determinados destinos, fruto del turismo masivo e intensivo, el texto nos recuerda el importante impacto sobre el PIB y la ocupación de las actividades turísticas. En cuanto a los efectos negativos sobre el medio ambiente de determinadas actividades turísticas, los autores nos recuerdan que las personas que trabajan deberían buscar trabajo, en caso de suspender el turismo, en otras actividades que probablemente tampoco serían neutras, en términos de sostenibilidad .
La aproximación posibilista al tema se concreta en plantear un amplio abanico de posibilidades para disminuir los efectos negativos del turismo manteniendo sus efectos positivos para el desarrollo económico y social de los países receptores. La ayuda de las TIC, nos explican, puede facilitar enormemente la gestión de opciones como el “numerus clausus” en determinadas actividades o destinos (¿cuántas veces uno se podrá visitar el Louvre a lo largo de su vida? ¿Una ocasión, dos? Con los recursos digitales actuales, estas oportunidades pueden aprovecharse para planificar un viaje a París en el momento en que se pueda reservar la visita). Sobre el problema del alojamiento, nos recuerdan que el uso del grandes volúmenes de datos puede servir para limitar el impacto que las plataformas de alquiler temporal han causado en el coste de los alquileres en las ciudades más deseadas por los turistas. Con ideas como restringir los alquileres de pisos y apartamentos sólo por estancias superiores a un mes o pedir a las plataformas que no admitan más del 20% de viviendas de un mismo edificio para el alquiler turístico. Es evidente que cualquiera de ambas soluciones debería concertarse entre las administraciones implicadas y las plataformas digitales que ofrecen los servicios de alquiler, pero al menos estas aportaciones permiten abrirse a buscar alternativas que se sitúen entre el nocivo liberalismo y la implausible prohibición total de los alquileres de muy corta duración de pisos y apartamentos.
En casos extremos, los autores proponen aplicar técnicas de marketing inverso para los destinos más colapsados. A partir del ejemplo de una campaña del ayuntamiento de Marsella, en la que se mostraban los aparcamientos llenos y los servicios saturados en el parque natural de “Las calanques” vecino de la ciudad provenzal, apuntan a soluciones similares por destinos como Venecia o sitios sobre visitados como el barcelonés Park Güell. Una vez más, nos apuntan, los recursos digitales podrían reforzar al marketing inverso proponiendo a los futuros turistas o bien actividades/destinos diferentes o bien horarios/fechas alternativas.
Un interesante esfuerzo, el de Viard y Medioni, de los muchos que necesitará el turismo para evolucionar positivamente hacia un mayor número global de visitantes sin comprometer ni la calidad de vida ni la sostenibilidad de los destinos más solicitados.
Referencias
Jérémie Peltier, La fête est finie?, París, El Observatorio, 2021
Nicolas Bouvier, El usage du monde, París, La Découverte, 2014 [1963].
Rémy Knafou, Réinventer le tourisme ; pour sauver nos vacaciones sans destruidora le monde, París, Faubourg, 2021.
Philippe Duhamel, «Le tourisme: lecture sur le temps et enjuux contemporains», Cahiers français n° 423 «Que tourismo después de la pandémie», septiembre-octubre 2021, p. 16-26, ici p. 21.
natalia heinich, La fabrique du patrimoine; de la cathédrale à la petite cuillère, París, Maison des sciences del Homme, 2009.
Silvia Brunel, Le tourisme, un atout menacé pour las pays en desarrollo», Cahiers français n° 423, septiembre-octubre 2021, p. 84-97, ici p. 85.
Ariane Fornía, «Comment concilier tourisme te desarrollo duradero», Cahiers français n° 423, septiembre-octubre 2021, p. 48-59, ici p. 50.
«El impacto négatif de Instagram sur las voyages», Lonelyplanet.fr, 12 février 2020
C.V.M.
Juan Viard (1947 – Metz): Sociólogo francés. Doctor en ciencias sociales director de investigación en el CNRS. Su actividad profesional se ha desarrollado en torno a la ordenación de territorio y, últimamente, de los “tiempos sociales” (vacaciones, jornada de 35 horas…). Su libro más conocido, “Cuando la Méditerranée nous submerge” (2017), trata del problema de la acogida de los inmigrantes en Francia. Antiguo soporte de Ségolène Royal, en 2017 fue candidato a diputado por Vaucluse bajo las siglas de LRM.
David Medioni (1978 – Marsella): Licenciado en derecho y periodista francés. Especializado en el seguimiento y evolución de los medios, fundó en 2017 Ernest, revista literaria independiente. Entre los libros publicados antes de lo comentado, destaca “tre en train” (2021), un divertido recorrido de anécdotas vividas sobre los raíles.
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