Us recomanem la lectura d’aquesta ressenya feta pels companys i companyes de Pensament Socialista, sobre el llibre “The battle of ideas in the Labour Party”, de Dimitri Batrouni.
A partir de fuentes escritas y entrevistas, el autor presenta el proceso de renovación de ideas del laborismo para adaptarse a problemáticas sociales, políticas y económicas que piden propuestas renovadoras desde la Segunda Guerra Mundial hasta el Brexit.
El autor se centra en la historia del Partido Laborista Británico desde finales de la Segunda Guerra Mundial, hasta la dimisión de Jeremy Corbyn como líder del partido tras los malos resultados en las elecciones generales de 2019. Su objeto de estudio es el debate de las ideas programáticas y de las políticas públicas que se derivan para hacer frente a los problemas que plantean cada uno de los períodos de estas casi ocho décadas, a los que han intentado dar respuestas los diferentes líderes del partido (con sus colaboradores).
El problema del Partido Laborista es que cualquier intento de transformación o adaptación como respuesta a cambios sociales, económicos o políticos da lugar a grandes divisiones entre la izquierda y la derecha del partido, por lo que muchas veces el lector que no está familiarizado con el laborismo británico tiene la sensación de que se trata de dos partidos distintos compitiendo por dominar una misma etiqueta (Labour). Se trata de dos grupos bastante homogéneos interiormente que se enfrentan para controlar el ideario, el programa y la organización del partido, como dos placas tectónicas se friccionan y desgastan, generando mucha tensión que se traduce en terremotos, que terminan habitualmente con un repuesto al liderazgo del partido.
Estos conflictos son consustanciales a la historia del laborismo, pero se acentuaron a partir del final de la Segunda Guerra Mundial con dos momentos culminantes que coincidieron con el liderazgo del partido y del gobierno de las dos figuras laboristas más destacadas de la segunda mitad del siglo XX: Clemente Attlee y Tony Blair. Attlee, primer ministro de 1945 a 1951 y líder del partido de 1935 a 1955, tuvo que dar respuesta a las exigencias de nacionalizaciones de una parte de la economía británica ya las tensiones provocadas por la situación internacional y el proceso de desmembramiento de el Imperio británico; mientras que Blair, primer ministro de 1997 a 2007 y líder del partido de 1994 a 2007, gestionó el encaje con la globalización y la economía neoliberal. Pese a sus logros electorales, ambos tuvieron que enfrentarse a una oposición interna muy organizada y con posicionamientos radicalmente diferentes a los suyos, que querían llevar el laborismo hacia posicionamientos programáticos y políticas públicas mucho más zurdas.
Si los dos líderes más importantes sufrieron esta oposición interna, el resto de líderes laboristas las han sufrido de forma aún más fuerte, que ha hecho que sus mandatos hayan sido cortos y convulsos.
La presión interna, los medios de comunicación y la necesidad de ganar elecciones no son muy adecuadas para realizar cualquier intento serio de renovación intelectual del partido. El autor ejemplifica esta situación con el mandato de Ed Miliband (2010-2015) que se centró en un debate intenso en torno a ideas nuevas, como el trabajo azul, Una nacion o la predistribución para ver los pros y contra para adaptarlas al programa del partido, pero que finalmente llevó a presentar una oferta electoral muy segmentada y orientada a públicos específicos que fracasó en las elecciones generales de 2015.
La conclusión del autor sobre este período es que cualquier proceso de renovación provoca inmediatamente el desacuerdo entre ambas facciones, que se basa en parte en enfrentamientos de personalidades y en parte en desacuerdos intelectuales, y en los que intervienen el equipo dirigente del partido, parlamentarios y militantes, y cada uno de estos grupos tiene un peso específico en las decisiones internas.
La reacción ante el fracaso de Miliband fue un giro a la izquierda con Jeremy Corbyn, que pretendía proponer nuevas ideas, que en realidad fueron una actualización del bennismo de las décadas de 1960-1970, adaptado a las circunstancias del siglo XXI . A pesar de tratarse de integrar propuestas sobre la democratización de los puestos de trabajo con ideas más radicales como el ingreso mínimo vital, el elemento esencial del bennismo original y de su actualización era una visión radicalmente negativa de la globalización y de la UE , como herramientas de la agenda neoliberal y, internamente, del blairismo de la derecha del partido. Esto provocó que las manifestaciones externas de los dirigentes del Labour fue muy tibia cuando se planteó el referendo sobre el Brexit. Este posicionamiento alejó a los votantes laboristas que no querían salir de la UE y no captó al votante que quería abandonarla ante el posicionamiento mucho más claro y rotundo de los conservadores. El fracaso en las elecciones generales de 2019 marcaron el fin del liderazgo de Corbyn y su sustitución por Keir Starmer.
Como conclusión general de este repaso de la historia del laborismo británico y de sus luchas internas, el autor llega a la conclusión de que “pese a que la batalla consume tiempo y agota las energías del partido, se trata de un componente esencial del ciclo vital del partido. Es la herramienta para la renovación del partido en cada uno de los ciclos políticos y, al final, cambia para afrontar los nuevos tiempos. El dominio de una facción sobre el partido impulsa al otro a entrar en acción para renovarse y aportar nuevas ideas… Si este proceso quedara completamente congelado, el partido estaría moribundo.”
Se trata de un libro muy interesante e incluso sorprendente por cualquier lector que no esté familiarizado con el funcionamiento interno del Partido Laborista Británico. El autor explica muy bien los mecanismos de renovación de las ideas programáticas y de las políticas públicas que propone el laborismo, así como de los condicionantes internos, las luchas de facciones, los personalismos y las ambiciones que dominan esta lucha entre la derecha y la izquierda del partido. Una lectura recomendable que aporta muchos elementos de reflexión sobre la renovación interna de la socialdemocracia y los partidos socialdemócratas.
Las referencias bibliográficas están integradas en el texto y no dificultan su lectura. Al final del libro se encuentra una completa bibliografía y un índice analítico.
F.G.L.
Dimitri Batrouni es licenciado en Informática, master en Relaciones Internacionales y doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de Bristol. Empezó su trayectoria profesional en la industria informática, pero después de terminar el máster trabajó ocho años en el Parlamento del Reino Unido y cuatro años en el Parlamento de Gales. También ha sido profesor asociado de Ciencias Políticas en la Universidad de Bristol. Militante del Partido Laborista, actualmente es concejal de la ciudad de Newport y analista senior de la Independent Monitoring Authority (IMA), entidad adscrita al Ministerio de Justicia del Reino Unido, cuya finalidad es el seguimiento del Brexit en relación con los derechos de los ciudadanos de la UE y la EFTA.
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